De La Bachata

I

Bonjour monsieurs, bonsoir la societé. A uno puede gustarle o nó la bachata, que en lo sentimental, ¡oh lalá! me atrevo a elucubrar que es una especie de sucedáneo del blues, guardando las distancias musicales. Sí, esta es una música tocada con guitarra acústica, bongós y usualmente maracas. Originalmente fué llamada "Música de Amargue" (y amargue es figuradamente igual a blues, tristeza).

En sus inicios a principio de la década del 60, o tal vez a finales de los 50 según algunos pocos, -tal vez confundiéndo el género con el bolero de taberna, que es otra cosa- era la música preferida de guardias, (soldados dominicanos, una de las clases sociales que mas gustaba y gusta de éste género) de campesinos y obreros, de domésticas, chiriperos (buscavidas) y buhoneros, que reflejaba de manera cruda y sin adornos los escenarios sórdidos y violentos de los burdeles y cabarets, de los bares y tabernas, de los amores apasionados, los rechazos crueles, los despechos, las mujeres "alegres", de "la vida" pero también la manera de llevar las lides amorosas entre las clases bajas de la sociedad.

Luego a álguien se le ocurrió adjudicarle, pardiez, el infausto y pesado nombre de "Bachata", que antíguamente no era mas que una especie de fiesta familiar, un jolgorio festivo entre vecinos acompañado de música de guitarras. El mote, según dicen algunos, proviene de la clase alta dominicana, que malmiraba esa expresión popular como algo execrable e indigno de ser catalogada como música.

Guitarra Acústica, el Arma de Reglamento del Amargue

Pero esta música cuya protagonista es la guitarra acústica, no anda sola, va acompañada primero del estilo de vida de su ejecutante, como los antiguos trovadores y juglares, como los bluesistas, pues el Amargue es una vivencia, una experiencia existencial, cultural, que se ve reflejada en los acordes de una guitarra acústica, en el requinto ejecutado en sus cuerdas con pasión y sentimiento, en las improvisaciones rítmicas del bongosero en su instrumento, en las desgarradoras voces del cantante, quien usualmente lleva las maracas, pero también, y tal vez la compañia mas importante, la del Ron y la Mujer.

Guitarra, Romo, Mujeres y Bachata = Una Gran Juerga

Me afirma un amigo bachatero: "Inevitable e indispensable es el romo y la compañia femenina en éste medio, pues no es posible disfrutar bailando o escuchando una bachata sin ambas presencias. Sepa usted que donde hay mujeres, bachata y Romo*, ya la fiesta está armada".

*Romo es la manera coloquial como los dominicanos le llaman al Ron

No obstante, se observa que en los tiempos que corren se toma mucha cerveza entre los bachateros, y entre las damas del medio la preferencia se reparte entre la cerveza light y las cidras suaves.

Otro amigo muy versado en el asunto me señaló que:"Quien como intérprete no haya experimentado y vivido un estilo de vida parecido, no puede ser llamado un bachatero auténtico".

Sacrebleu, si esto es así entonces cualquier músico toca una bachata, pero pocos pueden ser llamados auténticos bachateros, es algo muy claro!

(O sea: " Me gusta la Música Gótica, pero no soy un Gótico" - "Me gusta le Heavy Metal, pero no soy un Metálico"... Está muy claro)

No obstante, con la evolución del género, éste ha dejado de ser la expresión social de sus cultores originales y ahora es aceptada, escuchada y promovida por todas las clases sociales, en mayor o menor medida, sin escandalizarse como antes. El fenómeno ha llegado al extremo de desplazar al merengue como la expresión mas conspícua de la música popular bailable dominicana. Lo mismo ha ocurrido con los demás géneros populares como la salsa y la balada. En el caso del merengue, el asunto podría tener su explicación en el descuido y el facilismo de que adolece el merengue estandard actual, mostrándose desde hace tiempo en decadencia y agotado con muy pocas excepciones, como siempre.

¡La clase alta ya baila Bachata!

Eso por una parte, por la otra hay que ver el trabajo tesonero de excelentes bachateros, que se han ganado el aprecio del público ofreciendo un producto digno y decente, tanto en letra como en música. En ese orden hay que reconocer la obra de algunos importantes compositores, muy pocos pero cultos y que citaré oportunamente, que vivencialmente NO SON bachateros, pero que por amor al género han desarrollado una lírica y unas estructuras armónicas y melódicas sofisticadas y potables a todos los niveles de la sociedad.

Gracias a un acertado manejo de mercado se ha podido promover y vender por todo el mundo esta nueva bachata, tanto la que hacen ahora los de la vieja escuela, la bachata de la nueva ola de los 90 y la de los compositores mas sofisticados. Al mismo tiempo, navegando por los foros bachateros de La Red, se colige que hay inquietud entre un sector de los fans bachateros jóvenes, a saber, los hijos de los viejos seguidores, por conocer los trabajos de los pioneros, los de los orígenes, pero ya eso se hace mas difícil por múltiples razones. Era de esperar que fuera así, debido a la curiosidad natural de la gente.

Au revoir!

Continuará