miércoles, 7 de julio de 2010

Reflexiones Desde un Tiovivo Estelar III: Sobre algunas Plumas de Burro

Publicado originalmente en fecha 2 Noviembre 2009 at 16:43

Anunnakis Mesopotámicos

Acerca de las nuevas pendejadas de Annunakis sobre la aparición del hombre en la tierra, que se añaden a las ya pueriles e infantiles de origen religioso y a las pseudocientíficas de la ciencia institucional, y a las que tanto tiempo e insensateces se le dedica en algunos sitios de la Telaraña (en verdad en eso se convierte Internet a veces), he opuesto el comentario siguiente:



@ Saludos todos …


La enseñanza al detalle mas sensata sobre la aparición del hombre podeis encontrarla en el difícil y casi olvidado tratado esotericista (que nó esotérico) Antropogénesis, libro 3 de La Doctrina Secreta, basado en el arcaico libro oculto “Las Estancias de Dzyan”, compilado por H.P. Blavatsky.







Todo muy razonablemente expuesto, aunque en lenguaje arcaico, sin necesidad de Anunnakis, de Cthulhus ni demás yerbas. No prescinde de un dios por lo menos director y se ajusta a la evolución desde el punto de vista oculto. Ver los Elohim, Barhishads, Agnishvattas, todos entidades creadoras que nada tienen que ver con extraterrestres y sí con nuestra propia línea de evolución. En todo caso, estas entidades también han creado a los extraterrestres, y es de extrañar que éstos a sus contactados nunca le digan nada de sus propios orígenes.


El Tangyur, tesoros escritos buddhistas,
semejantes a las Estancias de Dzyan


Sobre la luna en el tomo I, Cosmogénesis está todo expuesto. Nada de insensateces como una Luna artificial y demás. Plantea La Luna (Selene) como la madre de La Tierra, terminando la vida allí por razones que no vienen al caso y transfiriéndola a un nuevo globo, éste, que daría comienzo a un nuevo ciclo. La Luna habría quedado allí como testigo. No es más que un cadáver. Por eso sus emanaciones se han visto tradicionalmente como negativas. No es mas que un atavismo. Siendo así, es obvio que algunas ruinas deberian quedar allí. Pero en algún sentido son NUESTRAS ruinas, humanas, en una etapa anterior de evolución.


La Doctrina Secreta

A mi juicio, estos dos tomos merecen un nuevo estudio concienzudo. Estaríamos usando así la Navaja de Ockham, y se descartaría definitivamente de toda discusión seria asertos absurdos, como el de los anunnakis etc. Plumas de burro cuyo manifiesto propósito es hacer dinero con la ignorancia de los tontos. Estos disparates pseudomitológicos no hacen mas que complicar innecesariamente un asunto que ya ha sido expuesto y explicado en las Estancias de Dzyan pero que por razones obvias aviesamente se ha pretendido desacreditarlo y por tanto nunca se le ha hecho mucho caso y en consecuencia permanece en el olvido.


Saludos,


Ogamov.-






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